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70 años después las pruebas realizadas a la hermana de Félix Yáñez, a los sobrinos de Pedro Voces y las evidencias de heridas de guerra de Antonio Vega permiten su identificación
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leonoticias.com 17/01/2013
Félix Yáñez, Pedro Voces y Antonio Vega.
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Los tres guerrilleros, cuyos cuerpos fueron exhumados en el año 2010, en la localidad lucense de Vilavella, han sido identificados. Las pruebas de ADN han sido llevadas a cabo por Labgenetics, uno de los laboratorios con más experiencia en identificaciones genéticas. Todos ellos eran originarios del Bierzo: Pedro Voces Canóniga, vecino de Villabuena; Antonio Vega Guerrero, de San Juan de la Mata y Félix Yáñez González, de Campelo.
Félix Yáñez ha sido identificado gracias a la muestra de ADN de su hermana Josefa, que tiene 98 años. En el caso de Pedro Voces ha sido uno de sus sobrinos. Y Antonio Vega Guerrero estaba identificado previamente, ya que se explotó una granada en la mano mientras gritaba su nombre, algo que figuraba en el atestado policial, de lo que durante la exhumación se encontraron evidencias en uno de sus brazos y restos de metralla.
La Guardia Civil acabó con sus vidas el 12 de noviembre de 1943, tras sorprenderles en las cercanías de Vilavella tras una delación de un antiguo colaborador de los guerrilleros. Un cuarto hombre, Ovidio Peláez Rodríguez, logró salir con vida del tiroteo, falleciendo sólo unos meses más tarde en un combate, esta vez en la provincia de León. Posteriormente, los tres cadáveres fueron trasladados a las cercanías de la iglesia de Vilavella, siendo enterrados en la parte posterior de la misma, extramuros del cementerio parroquial.
Información vecinal
La información aportada por los vecinos de la zona y la existencia de numerosa documentación oficial sobre el suceso, permitió en 2010 ubicar el lugar y confirmar las existencia de los cadáveres de las tres víctimas, así como la fecha en la que se produjeron los asesinatos.
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Imagen de los trabajos realizados en la fosa por parte de la ARMH.
En de 2010, la ARMH llevó a cabo la exhumación de los cuerpos. Los trabajos fueron dirigidos por René Pacheco y Andrés Crespo, arqueólogos de la ARMH y con el apoyo de varios voluntarios llegados de diversas partes de España. Una vez exhumados individualizadamente, los restos fueron trasladados al laboratorio ponferradino de la ARMH, donde fueron estudiados por la antropóloga madrileña Elena Vergara, experta en el análisis de restos exhumados en fosas de la represión franquista en España.
Denuncia
La aparición de los restos fue denunciada ante el juzgado de Becerreá (Lugo). Después de un año de espera, y tras el sobreseimiento definitivo del caso, el pasado mes de octubre de 2012 la ARMH tomó las muestras a los familiares de los asesinados. Las identidades de los tres esqueletos recuperados corresponden con las de los guerrilleros reclamados por sus familiares.
En la actualidad la ARMH está investigando la muerte del hermano de Pedro Voces, Salvardor, abatido en 1948 por la Guardia Civil en Rao (Lugo).
Félix Yáñez ha sido identificado gracias a la muestra de ADN de su hermana Josefa, que tiene 98 años. En el caso de Pedro Voces ha sido uno de sus sobrinos. Y Antonio Vega Guerrero estaba identificado previamente, ya que se explotó una granada en la mano mientras gritaba su nombre, algo que figuraba en el atestado policial, de lo que durante la exhumación se encontraron evidencias en uno de sus brazos y restos de metralla.
La Guardia Civil acabó con sus vidas el 12 de noviembre de 1943, tras sorprenderles en las cercanías de Vilavella tras una delación de un antiguo colaborador de los guerrilleros. Un cuarto hombre, Ovidio Peláez Rodríguez, logró salir con vida del tiroteo, falleciendo sólo unos meses más tarde en un combate, esta vez en la provincia de León. Posteriormente, los tres cadáveres fueron trasladados a las cercanías de la iglesia de Vilavella, siendo enterrados en la parte posterior de la misma, extramuros del cementerio parroquial.
Información vecinal
La información aportada por los vecinos de la zona y la existencia de numerosa documentación oficial sobre el suceso, permitió en 2010 ubicar el lugar y confirmar las existencia de los cadáveres de las tres víctimas, así como la fecha en la que se produjeron los asesinatos.
Imagen de los trabajos realizados en la fosa por parte de la ARMH.
En de 2010, la ARMH llevó a cabo la exhumación de los cuerpos. Los trabajos fueron dirigidos por René Pacheco y Andrés Crespo, arqueólogos de la ARMH y con el apoyo de varios voluntarios llegados de diversas partes de España. Una vez exhumados individualizadamente, los restos fueron trasladados al laboratorio ponferradino de la ARMH, donde fueron estudiados por la antropóloga madrileña Elena Vergara, experta en el análisis de restos exhumados en fosas de la represión franquista en España.
Denuncia
La aparición de los restos fue denunciada ante el juzgado de Becerreá (Lugo). Después de un año de espera, y tras el sobreseimiento definitivo del caso, el pasado mes de octubre de 2012 la ARMH tomó las muestras a los familiares de los asesinados. Las identidades de los tres esqueletos recuperados corresponden con las de los guerrilleros reclamados por sus familiares.
En la actualidad la ARMH está investigando la muerte del hermano de Pedro Voces, Salvardor, abatido en 1948 por la Guardia Civil en Rao (Lugo).
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